jueves, 17 de mayo de 2012

¿Confusión?









Tenía urgencia de visitar al médico, la cola era inmensa y el poco sentido común de las personas, que tienen a bien atendernos, hacía desesperante la mañana. No sabía si iba a salir curado  o mejorado después de la visita al médico del seguro, o de repente, con tanta desesperación aumentaría mi dolor de  cabeza. Una señora parada a mi costado, durante unos diez minutos, renegaba de la triste atención, como queriendo explotar de la cólera y la impaciencia de la espera. Una señora pujando en el pasadizo respiraba hondo por el peso y el calor que le generaba su primogénico, en su ser. La vecina que me acompaña se retira regresando a los pocos minutos completamente acalorada y con una cara de  desesperación. Y, bien segura de si misma me dice :
 -¿Mi celular? - ¿ Qué ?, ¡ DEVUÉLVEME EL CELULAR, AQUÍ SE ME HA QUEDADO !...
- Pero Sra. Yo no he visto nada, menos le he cojido celular alguno... 
-AHORITA MISMO ME DAS MI CELULAR O LLAMO A LA POLICIA.
 La gente me quedaba mirando, sentía verguenza por la desconfianza, no atinaba a nada, me estaba quedando sin argumentos ante tanta violencia de la Sra. que insistía que le devolviera su celular. Me quería ir y dejarla sola hablando, pero me iba a culpar para el resto de personas que asombradas me miraban, muchas conocidas... La Sra. seguía hablando y culpándome, en eso se para un caballero y le dice, Sra. deme su numero para llamar, de repente suena y sabremos quien lo tiene. La Sra. se lo dió y al hacer la llamada, le empiezan a vibrar las tetas a la Sra., se toca el pecho, me queda mirando avergonzada, me pide disculpas. Yo le fijé la mirada, no se la quitaba de encima, no le acepté las disculpas. cambiaba de gestos, quería que se la tragara la tierra de la verguenza. Yo seguía mirándola fijamente sin decirla nada... No volvió a decir nada ni a mirar a nadie, tampoco volvió a pedir disculpas, se dió media vuelta y se retiró...